La Provincia del Chaco fue
colonizada por inmigrantes.
Su capital,Resistencia
recibió a los primeros
colonos, y vive la cultura,
la de un pueblo donde el
arte se le entrama,
mezclada en un área con
una vegetación cuidada y
húmeda gracias a su vecino,
el impactante Río Paraná.
Esta ciudad, con una gente cálida que sabe recibir al artista,
integrarse, ampliar su vocabulario en relación a este fenómeno
especial que la convierte en uno de los destinos del país en el
que la cultura ocupa un lugar central.
La temporada aquí comienza en otoño, cuando la gente acude al
Chaco en busca de aventura y pesca, pero la cultura sigue siendo
la que más convoca y sorprende.
Mientras en febrero, los carnavales provocan una ocupación del
35 por ciento, desde abril a julio, los festejos aborígenes y la
Bienal de Escultura a cielo abierto resultan en una ocupación
del 83 por ciento.
Todas las áreas de la cultura son oferta en el Chaco. En el
sudeste está el "campo del cielo" o Parque de los Meteoritos,
centro de investigación e interpretación de la NASA. Este
fenómeno ocurrió hace 4.000 años y es un verdadero centro de
interpretación del espacio.
El coro toba Chelaalapi (Banda de Zorzales), es un orgullo
chaqueño que canta temas acompañado de instrumentos originales
de sus ancestros, como un violín de lata y un zapallo hueco.
La ciudad de Roque Sáenz Peña recibe visitas a sus aguas
termales todo el año, pero en julio celebra la Feria del Libro
y la Feria del Libro Regional Chaqueño que atraen por igual.
También se efectúa un Encuentro de Escultura en Madera que se
repite en San Martín, con identidad propia. También hay
encuentros para jóvenes: Chaco a todo rock y Musicanto joven.
En el impenetrable, tierra de wichis y de tobas, funciona un
centro cultural apoyado por la Fundación Chaco Artesanal,
entidad que ayuda a los pueblos originarios de la zona.
En Resistencia, el cine donde funciona el Complejo Natural Guido
Miranda - periodista, ensayista, historiador y sociólogo chaqueño,
fue reciclado en sala de teatro y exposición de filmes e impulsa
un cine nómada que lleva películas al interior.
Otros atractivos de la ciudad son la Peña Martín Fierro:
empanadas, asado y todo tipo de comida típica se saborean todo
el año en esta blanca casona, mientras se escucha música o se
disfrutan espectáculos autóctonos.
El Fogón de los Arrieros, de los hermanos Efraín y Aldo Boglietti:
toda una institución donde conviven Petorutti con Carlos Monzón,
apenas como un ejemplo. Puede ser un museo o una caja de sorpresas,
se atesoran en el lugar las manifestaciones artísticas memorables
de Resistencia.
En su vereda se ubicó la tumba del perro Fernando, un animal
vagabundo amado por los chaqueños de la década del ´50, que se
transformó en símbolo de la amistad. Y también tiene su escultura
frente a la Casa de Gobierno de la Provincia.
El Paseo de los Artistas y Artesanos es un amplio espacio verde
que rodea el Museo de Ciencias Naturales. Todos los domingos los
artistas chaqueños exponen pinturas, artesanías, grabados y otras
manifestaciones.
Algo parecido ocurre en la Plaza 25 de Mayo de 1810: superficie
de 4 manzanas ubicadas en el centro de la ciudad y verdadero
botánico natural adornado con monumentos, estatuas y esculturas.
En uno de sus ángulos se ve la catedral, con dos esculturas
gigantes de Fabriciano, trabajadas en mármol de Carrara, con
superficies rugosas y lisas en contraste. Y en el otro, los
domingos se exhiben artesanías.